El desplazamiento del trabajo por la llegada de la Inteligencia Artificial es un miedo latente, se puede ver en películas y escuchar en las conversaciones de profesionistas. En 2023, OCC Mundial publicó una encuesta que reveló que el 43% de los trabajadores mexicanos cree que la IA los reemplazará en sus funciones. Mientras que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y el Banco Mundial dieron a conocer un reporte que apunta que entre un 26% 38% de los empleos en América Latina y el Caribe están expuestos a inteligencia artificial, mientras que entre un 2% y un 5% corre el riesgo de automatización total. Esta percepción podría estar ligada a que las implementaciones de la IA cada vez son más evidentes para la población. En entrevista para Expansión, Guayente Sanmartin vicepresidente senior y presidente de división, sistemas comerciales y soluciones de pantallas de HP, comentó que la IA existe -por ejemplo- en las PCs desde “hace unos años”, la diferencia es que hasta ahora era “tecnología invisible”.
“Eran cosas que no veías y ahora vas a poder tener y tecnología con la que puedes interactuar y va a ser un compañero, le llamamos personal computer o computadora personal (PC) y ahora sí va a ser personal y va a ser tu compañero”, señaló durante el HP Imagine AI en Nueva York. De acuerdo con Sanmartin, la visión no es sustituir o reemplazar a los humanos, sino complementarlo. Sin embargo reconoce que hay trabajos, particularmente los repetitivos, en los que esta tecnología sí tendría cabida en lugar de las personas. La representante de HP también comentó que con una implementación responsable, la IA incluso podría ayudar a ganar talento, conectando personas de distintas partes del mundo con -por ejemplo- traductores de voz o permitiendo a los profesionistas potenciar sus habilidades con sus diversos usos. El reporte de la OIT y el BM señala que pese a los efectos que podría tener en la región transformando puestos de trabajo existentes o creando nuevas posiciones, “las brechas en la infraestructura digital y otras desigualdades podrían dificultar los posibles impactos”. Según el estudio, las mujeres, los trabajadores urbanos, más jóvenes y educados en los sectores formales, se enfrentan a mayores riesgos de automatización por la inteligencia artificial generativa (IAG), “lo que podría empeorar las desigualdades económicas regionales y la informalidad”.
Los beneficios de la GenIA
En el caso de los beneficios que puede traer la IAG, el reporte señala que podría mejorar la productividad de entre el 8% y 14% de los puestos de trabajo, sobre todo en los sectores urbano, educativo y formal, y entre las personas con ingresos más altos, señaló la investigación. Estos beneficios se distribuyen de “manera más equitativa entre los trabajadores en términos de género y edad”, aunque es más probable que recaigan en mayor parte en empleos formales en zonas urbanas ejercidos por personas con “niveles de educación y de ingreso más altos”. “Los trabajadores asalariados y autónomos —como peluqueros, vendedores, arquitectos o agentes inmobiliarios— y los que se desempeñan en los sectores de educación, salud o servicios personales tienen más probabilidades de beneficiarse de los efectos transformadores de la GenAI (inteligencia artificial generativa)”, señala el informe. Sanmartin señala que HP considera dos grandes visiones sobre cómo se desarrollará esta tecnología a futuro: la primera es la conectividad entre los dispositivos con IA y como se comunican y comparten información entre sí. La segunda está relacionada al como la IA trabaja para las personas como un agente virtual permanente. Con información de Reuters.